Abogada de Sáenz Peña renunció a la defensa del presunto abusador de una nena tras ser escrachada por familiares
Se trata de Adriana Molina quien el pasado viernes amenazó y exigió a Diario Chaco no ser nombrada como la defensora del joven denunciado por abuso sexual simple con acceso carnal. Hoy la escracharon y testigos ocasionales aseguraron que fue por "palabras desafortunadas".

El pasado viernes, frente a los Tribunales de Sáenz Peña, familiares y vecinos de una niña de 11 años que habría sido abusada sexualmente protestaron contra la orden de libertad otorgada por el Juzgado de Garantía al hombre acusado de violar a la menor. Diario Chaco cubrió la manifestación, relatando lo ocurrido, y a las horas de la difusión del hecho recibió una amenaza por parte de la abogada del imputado, Adriana Molina.
En la nota difundida el 16 de diciembre , este medio relató que, según consta en el expediente, el presunto abuso fue denunciado en el mes de octubre cuando la menor le relató situaciones a su madre que habrían ocurrido cuando se quedaba sola.
Es por eso que la pequeña fue sometida a una Cámara Gesell que concluyó en un informe psicológico que detalló que "se desprenden indicadores que dan cuenta de que la niña ha estado expuesta a situaciones que involucran un avasallamiento a su cuerpo y psiquis infantil". Además, los expertos advirtieron que en ella no se detectaron "motivaciones tendientes a mentir o fabular".
La concentración familiar frente al juzgado provocó que el hecho tome estado público. Según manifestaron a DCH , protestaban en rechazo a la decisión del Juzgado de Garantías de hacer lugar a la oposición de la prisión preventiva que interpuso la defensa del imputado.
Horas después de la difusión de la noticia, la corresponsal en Sáenz Peña de Diario Chaco , María Dora Flores, recibió un llamado intimidatorio por parte de la abogada Adriana Molina en el que "advirtió" a la periodista de que su nombre no sea mencionado en el trabajo periodístico. "Ni me nombres, lo único que te advierto", expresó en la comunicación.
"A mí ni me nombres que yo soy abogada del muchacho. No hay prueba de violación" , aseguró Molina en la llamada que, como todas las que involucran el trabajo periodístico, quedó grabada, por lo que sus advertencias y amenazas ya fueron remitidas al estudio jurídico que se ocupa de las cuestiones legales que atañen a este medio.
La defensora del imputado aportó en la comunicación la "historia" que -expresó- hace que la denuncia se trate de una "venganza". "Todo el mundo, a consecuencia de esa nota, está sacando en Facebook todo lo otro. Una cuestión trae a otra", le cuestionó Molina a la corresponsal sobre la opinión pública en redes sociales.

"Estoy llegando a Resistencia y se van a comer un juicio todos, porque encima poner ´un violador´, poner el titular violador es una barbaridad, una atrocidad", insistió mientras insistió en no ser nombrada en la nota ya publicada. "A mí ni me nombres, ni me saques por esta causa, lo único que te advierto. Esto es peligrosísimo lo que está pasando, todo lo que postearon en ´face´ y bueno, todos serán demandados", siguió.
Molina aseguraba que el titular de DCH calificó a su -hasta ese momento- defendido como un "violador", algo falso teniendo en cuenta que en la nota difundida se aclaró que se trataba de una acusación judicializada. Cabe destacar que el imputado no fue condenado ni absuelto ya que la causa aún no fue elevada a juicio, por lo que el relato periodístico menciona los hechos en potencial.
Con acusaciones erróneas hacia Diario Chaco , la abogada aseguró que el director de este medio, Juan Pedro Teruel, y la corresponsal María Dora Flores se iban a "comer un juicio".
RENUNCIA A LA DEFENSA
Esta mañana familiares de la menor volvieron a encabezar una protesta con carteles que señalaban a la abogada Molina como "defensora de abusadores" e intentaron escracharla. La Policía tuvo que tomar intervención para evitar algún tipo de agresión y, posteriormente, Molina terminó presentando un escrito por el que renunció a la defensa técnica del supuesto abusador.
Según testigos ocasionales de lo ocurrido, la manifestación la encabezaban vecinos del barrio Santa Mónica junto a los abuelos de la nena presuntamente abusada cuando la abogada salió de fiscalía y les habría dicho "por más que hagan marcha no van a lograr que él quede preso".
Al ser reconocida por los presentes, vecinas comenzaron a correr a la abogada que se habría refugiado en el baño de una confitería. La dueña del lugar salió gritando y en ese momento se acercó personal de la división policial que está a pocos metros y asistió a Molina hasta que la trasladaron en un patrullero, tal como lo exponen las imágenes a las que accedió DCH .